La RSD Indian Scout es la primera de las tres motos previstas en el programa de transformaciones Forged 2024. Una moto creada por Roland Sands Design, sobre la base de la nueva Indian Scout 1250, cuyo propietario será Joshua Dun, el batería del grupo Twenty One Pilots.
Cruisers… deportivas
Si algo se le da bien al equipo de Roland Sand Design es darle un toque “picante” a las tranquilas cruiser de fabricación americana. Algunos buenos ejemplos son la desaparecida “No Regrets” y la “The Glory Stomper”, motos que son fácilmente reconocibles como creaciones del fabricante californiano, lo mismo que sucede con la RSD Indian Scout. Una moto creada sobre la base de la nueva Indian Scout 1250, para el batería del grupo Twenty One Pilots, Joshua Dun.
Forged
Como sucedió el año pasado con la llegada a los concesionarios de la última versión de la plataforma Chief de Indian Motorcycle, la decana de las marcas de motos americanas ha activado el programa Forged. Gracias a él, algunos de los más reconocidos fabricantes artesanales haran una moto única utilizando la nueva Indian Scout 1250 como lienzo. Para este año ha repetido Roland Sands, al que se han unido: Brittney Olsen y Ronna Norén, proponiendo cada uno de ellos una creación que haga honor a los más de 100 años de historia del concepto Scout.
Scout 1250
Pero antes de entrar en faena, vamos a ver las principales características de esta nueva versión de la gama Scout de Indian Motorcycle. Como su propio nombre indica, las nuevas Scout 1250 incorporan un nuevo propulsor con esta cilindrada, denominado SpeedPlus. Este bicilíndrico en “V” con refrigeración líquida y sus cilindros calados a 60º, tiene un diámetro x carrera de: 104 mm x 73,6 mm; y una compresión de 12,5:1. El resultado son entre 105 y 111 caballos de potencia y 108 y 109 Nm de par motor, dependiendo del modelo. Junto a él y manteniendo la reconocible silueta baja y alargada de las Scout se ha creado un nuevo chasis, tipo doble cuna, a base de tubos de acero. Que dispone en la parte trasera de una clásica suspensión de doble amortiguador. Como podéis ver, una combinación ganadora que seguro proporcionará muchas alegrías a la marca.
Club Style
Al principio mencionábamos la capacidad de RSD para convertir motos cruiser en deportivas, pues bien, una opción muy de moda es dar a estas motos una estética Club Style. Para ello en el 1365 de la Obispo Avenue (Long Beach / CA) se ha optado para este proyecto con elevar la altura de la Scout original, ganado espacio libre al suelo e incorporando de paso una mejor suspensión. Esto se ha conseguido montando en el tren delantero la horquilla de una FTR 1200 (ZF Sachs), cuyas tijas han necesitado consecuente adaptación al nuevo chasis. Y en la parte trasera, se ha combinado un basculante también de una FTR debidamente customizado; y dos amortiguadores Indian, con piggyback, reposicionados más altos gracias a unas piezas específicas del catálogo de RSD y algo de artesanía.
Tacto deportivo
En consonancia con la mejora de las suspensiones, también se ha trabajado en los apartados frenos y ruedas. En el primero, la solución tomada es la misma que en las suspensiones… aprovechar las de una FTR. Así encontramos en el tren delantero dos discos de 320 mm, otras tantas pinzas radiales de cuatro pistones y una maneta de accionamiento también radial. Todo ello de la marca Brembo, que también ha proporcionado el material para la parte trasera: una pinza axial de dos pistones y un disco de 260 mm.
En cuanto a las ruedas, ha habido bastante más originalidad. Siendo la combinación elegida unas llantas RSD Sector de 17 pulgadas, creadas en cooperación con Dymag; y unos pegajosos neumáticos Dunlop Sportmax Q5S, de medidas 120/70 y 180/55/17… todo, todo muy deportivo.
Ed “Iron Man” Kretz
Siguiendo con la deportividad que se le ha aplicado a esta Scout. Como os decíamos al principio, la idea del programa Forged de este año era indagar en los más de 100 años de historia de las Scout y esta tiene una larga lista de episodios deportivos como los protagonizados por Ed “Iron Man” Kretz, que a la postre ha sido la inspiración de esta moto. A modo de reseña, decir que Ed Kretz fue un piloto y preparador de motos deportivas durante las décadas de los 30 y 40. Fue él, quien ganó la primera carrera de las míticas 200 Millas de Daytona, allá en 1937… ¿Sabéis con qué moto?… acertasteis, con una Indian Scout. Sin duda suficientes razones para que el equipo de Rolans Sands se fijara en él.
Siguiendo con la moto, para potenciar su aspecto deportivo/Club Style a nivel ergonómico, se han colocado unas torretas RSD Sector, de 8 pulgadas de altura, que incluyen un espaciador impreso en 3D y un soporte para la instrumentación. Sobre las que ha encontrado acomodo un manillar Pro Taper Carmichael. También se han reposicionados los reposapiés a una posición más centrada y alta. Y cerrando el triángulo se ha montado un asiento personalizado del especialista Saddlemen.
Negro y amarillo
Para acabar, vamos a centrarnos en la carrocería de la RSD Indian Scout, no sin antes volver a una pieza del motor que merece toda nuestra atención. Esta no es otra que el impresionante sistema de escape artesanal, dos en uno, fabricado en titanio por Aaron Boss, del equipo de RSD. Que tiene como remate final un silencioso SC Projec de la gama CR-T.
De la carrocería debemos destacar su parte trasera, de inspiración Flat Track, que se ha fabricado a partir de una pieza del catálogo de RSD, específica para las Scout de la generación anterior. Donde se han personalizado los laterales y el perfil inferior para adaptarse a esta nueva Scout. También ha requerido cierta artesanía la cúpula, cedida por una Scout Bobber y que ha tenido que acoplarse a la horquilla de una FTR.
En cuanto al color, la elección ha sido una base de negro brillante con detalles en amarillo; y como decoración los clásicos emblemas de Indian Motorcycle y un pequeño guiño a Ed Kretz bajo el asiento en forma de gato Sylvestre. Cuya explicación la encontramos en una tarjeta que apareció durante la génesis del proyecto, entre los recuerdos que aportó el historiador Grant Peterson, donde se podía leer: “¿Te enojarías mucho si te pidiera que llevaras tu tonto problema al pasillo?”.