Escuela de campeones.
Desde que a mediados de los 90 Aprilia se embarcara en el mundial de velocidad, la marca de Noale no ha dejado de mimar a sus deportivas de calle, y en especial a sus 125. Tras crearse una buena reputación a base de motores de dos tiempos, ahora nos presentan su nueva RS4 125… de cuatro tiempos.
Una gran mayoría de los que tenemos el carné de moto desde hace algún tiempo, comenzamos en este mundillo con mecánicas de 2 tiempos. Era sin duda un buen punto de partida, pequeñas, ligeras y con motores con la suficiente mala leche como para ser divertidos y a la vez viables para un conductor novel. Pero el tiempo pasa, y gracias al uso o abuso, como queráis llamarlo, que hemos hecho de nuestro planeta, las restricciones a estos propulsores no han tardado en llegar.
Aprilia ha sido una de las últimas en adaptarse a las medidas “ecológicas” que Europa está exigiendo a las motos de cuarto de litro, y no por falta de la tecnología necesaria, las GPR de Derbi ya montan desde el año pasado motores cuatro tiempos y son del mismo grupo empresarial al que pertenece Aprilia, sino por algo que va más allá de los simples números y de la disponibilidad de tecnología… su tradición deportiva. Como nos comentaba Maura Paccagnella (Aprilia Product Manager) en el briefing previo a esta prueba, Aprilia siempre ha aplicado la experiencia adquirida en los circuitos sobre sus motos de calle y sobretodo en sus RS, que son consideradas como su “Escuela de Campeones”, por esto, ya desde las AF1-125 “Réplica” de finales de los ochenta, hemos visto desfilar por sus concesionarios un sinfín de motos que emulaban los éxitos cosechados en las pistas por la marca transalpina. Quizás por esta razón desde Noale han querido aprovechar la consecución del mundial de Superbikes del 2010, para jubilar sus “RS” de 2 tiempos y presentar esta réplica a escala de la moto vencedora en manos de Max Biaggi del mundial de 4 tiempos por antonomasia.
Como ya hemos comentado, la mayor novedad de esta RS es la incorporación de un motor de 4 tiempos. Se trata de un monocilíndrico con cuatro válvulas, inyección electrónica y refrigeración líquida, que cubica 124,8cc y que entrega una potencia autolimitada a 15cv, el máximo permitido en Italia, España y la mayoría de los países donde va a ser comercializada. Para sacarle las máximas prestaciones a este propulsor, se monta una caja de cambios de 6 marchas, un embrague multidisco en baño de aceite y un sistema de inyección electrónica firmado por la prestigiosa Magneti Marelli. Además, se ofrece como extra la posibilidad de montar el sistema de cambio rápido Quick Shift, heredado directamente de su hermana mayor, la RSV4 APRC, y que por un precio de 99€ (IVA no incluido) nos permitirá subir marchas sin tener que accionar el embrague ni dejar de acelerar, una auténtica tentación apta para todos los bolsillos.
En cuanto al chasis, podemos decir que está a la altura de todos los bastidores deportivos montados por la marca de Noale. Es del tipo perimetral y está fabricado en aluminio, consiguiendo un óptimo compromiso entre ligereza y rigidez. Es fácilmente distinguible a través de los espacios que deja a la vista el escueto carenado, que incluso permite ver claramente el motor. Esta característica del carenado, unida a la triple óptica frontal y al minúsculo y afilado colín consigue generar una imagen de familia con la RSV4 de litro, que seguro será del agrado de los futuros propietarios de esta 125.
Volviendo al colín, hay que mencionar que para realzar más si cabe la imagen deportiva de la moto, nos ofrecen la posibilidad de adquirir una tapa con la que podremos sustituir de una manera sencilla el asiento del pasajero convirtiéndola en “monoposto”, también existe un amplio habitáculo bajo el asiento del conductor para guardar el candado, el móvil o lo que se nos ocurra. Otros accesorios que nos ofrece Aprilia para esta moto son: una cúpula más alta, tapas para cubrir los agujeros dejados al retirar los retrovisores y el portamatrícula, una opción regulable en aluminio de este último y el ya mencionado Quick Shift, todo muy enfocado a un posible uso en circuito.
Pero una deportiva que se precie, aunque sea de pequeña cilindrada, debe tener una parte ciclo con unos buenos componente, y este es uno de los puntos fuertes de la RS4. Para empezar se ha montado una horquilla invertida con barras de 41mm de diámetro y recorrido de 110mm; detrás, la opción elegida ha sido un monoamortiguador anclado directamente a un basculante asimétrico de aluminio. El apartado frenos tampoco ha sido descuidado, el tren delantero lleva un disco de acero inoxidable con diámetro de 300mm y una pinza radial de cuatro pistones; para la rueda tractora se ha elegido un disco de 218mm y una pinza convencional de un solo pistón. Siguiendo con las ruedas, decir que sus llantas son de 17”, fabricadas en aleación ligera, tienen 6 palos en forma de “Y” griega y albergan neumáticos 110/80 y 130/70, suficiente cantidad de goma para una moto de 125cc.
Para finalizar este pequeño repaso sobre las características más sobresalientes de esta Aprilia, quería reseñar un par de detalles que me han gustado en especial, la instrumentación, que combina un tacómetro analógico con una parte digital en la que encontramos el velocímetro y demás información, y la colocación del escape por debajo del motor, totalmente integrado con la parte baja del carenado, al estilo de las extintas Buell o las actuales superdeportivas de KTM, que consigue dejar limpia la zona trasera de la moto y optimizar el centrado de masas.
En Aprilia tienen tan claro el ADN deportivo de su RS4-125 que decidieron convocar a la prensa internacional en la pista de pruebas de Vairano, situada a unos 15 Km. de Pavia, al sur de Milán. Este complejo, propiedad de un grupo editorial italiano, está perfectamente equipado para la realización de todo tipo de pruebas, ya sea en su pequeño circuito o en su larga pista de aceleración, con más de 3 Km. de distancia, donde pudimos ver rodar un Masseratti durante nuestra prueba.
Nosotros utilizamos el circuito en una configuración en la que recorríamos unos 2,5 Km, completamente planos, divididos en 9 curvas a derecha y 6 a izquierda, casi todas bastante rápidas salvo un par de ellas que te obligaban a sacar el casco del carenado, sin dudas un trazado perfecto para intimar con una 125.
Tras comer un poco en las mismas instalaciones y disfrutar de un corto briefing, empezamos a rodar. La prueba constaba de 4 tandas de 15 minutos en las que alternábamos unidades 100% estándar con otras equipadas con el cambio rápido Quick Shift, estas últimas nos permitieron comprobar lo bien que va dicho sistema, sobretodo en las marchas altas.
Una vez te subes a la RS4-125, la primera sensación, es que estás en una moto de mayor cilindrada, con un amplio habitáculo y con una posición de conducción muy cómoda. Su altura al suelo, 820mm desde el asiento, en realidad se convierte en mucho menos gracias a lo estrecho del conjunto, lo que la hace apta para la mayoría de sus futuros propietarios, jóvenes de entre 16 y 25 años. Los semimanillares van anclados directamente en la tija superior y no cargan en exceso las muñecas, teniendo todos los interruptores situados de manera lógica, quizás el único pero fue la maneta del embrague que me resulto un poco dura. Los reposapiés van lo suficientemente altos como para buscar los límites del 130 trasero pero sin llegar a mortificar nuestros aductores; las palancas del freno y del cambio están bien posicionadas tanto en distancia al reposapiés como en altura, no siendo necesario hacer flexiones extrañas con el pie para accionarlos, las marchas entran con bastante facilidad y solo tuve algún problema a la hora de buscar el punto muerto con una de las unidades que probé.
Siguiendo con el puesto de conducción, el cuadro de instrumentos, analógico/digital, es fácil de mirar, al igual que sus retrovisores que cumplen con su función de manera más que digna. La cúpula y el carenado, una vez agachado y con nuestro trasero tocando el colín, consiguen su objetivo de una forma eficaz, dada las velocidades máximas que podemos alcanzar con esta moto.
Una vez en marcha, aplanado sobre su bonito depósito de gasolina, enlazando curvas rápidas, es cuando te das cuenta de lo bien que va esta moto… mientras vas engranado marchas en la zona alta del tacómetro, te encuentras con una parte ciclo que está por encima de la media. Tanto suspensiones como chasis transmiten confianza en todo momento, haciendo fáciles los cambios de dirección y manteniendo en su sitio al conjunto durante las pocas frenadas fuertes que tiene este trazado. Sobre este último punto, buena parte del mérito la tiene el equipo de frenos montado en la RS4, sobretodo su pinza delantera que nos paraba de una manera progresiva cuando apretábamos con decisión la maneta derecha.
En cuanto al motor, a pesar de sus autoimpuestos 15cv, tiene una entrega de potencia muy utilizable a poco que estés pendiente de la marcha en la que estás circulando y de lo que te viene por delante, evidentemente no recupera como una moto de mayor cilindrada, pero tampoco lo hacían los anteriores 2 tiempos, así que lo mejor es dejarse embriagar por el sonido que emana de su escape y aprovecharse del buen trabajo hecho en la inyección que acompaña a este monocilíndrico.
Para acabar, decir que nos comentaron que se estaba trabajando en la posibilidad de ofrecer un kit de potenciación que incluiría un escape menos restrictivo e incluso un aumento de cilindrada, destinado posiblemente a una futura copa monomarca. Está claro que por parte ciclo no va a ser… yo no soy un ingeniero, pero me dio la impresión durante toda la prueba que iba más que sobrada en este sentido. En cuanto al motor, siempre quedará la leyenda de los 2 tiempos de 125, en gran parte sustentada en las mil “perrerías” poco legales que les hacíamos a nuestras monturas buscando aumentar sus prestaciones, pero como ya decía al principio de este reportaje, los tiempos cambian y hay que vivir la situación actual. Así que si estas interesado en una moto para comenzar a desarrollar tu lado más deportivo, aquí tienes la opción que nos propone una de las marcas con más experiencia en esta cilindrada, 36 títulos en el campeonato del mundo de velocidad les avalan.
FICHA TÉCNICA:
Modelo: Aprilia RS4 125.
Precio: 4.137 €.
PARTE MOTOR
Motor: Monocilíndrico 4T DOHC de 4 válvulas.
Refrigeración: Líquida.
Alimentación: Inyección electrónica Magneti Marelli.
Cilindrada: 124,8 cc.
Potencia: 15 cv (11 Kw).
Caja de cambios: 6 velocidades.
Embrague: Multidisco en aceite.
Transmisión final: Cadena.
Sistema de escape: Salida por debajo del motor.
PARTE CICLO
Chasis: Perimetral en aluminio.
Basculante: Doble viga asimétrico aluminio.
Distancia entre ejes: 1.350 mm.
Longitud máxima: 1.953 mm.
Anchura máxima: 740 mm.
Altura máxima: 1.138 mm.
Altura del asiento: 820 mm.
Suspensión delantera: Invertida de 41 mm, 110 mm de recorrido.
Suspensión trasera: Monoamortiguador, 130 mm de recorrido.
Freno delantero: Pinza radial de 4 pistones.
Discos delanteros: Discos de acero inoxidable de 300 mm.
Freno trasero: Pinza de 1 pistón.
Disco trasero: Disco de acero inoxidable de 218 mm.
Llantas: De 17” en aleación ligera de 6 palos en forma de “Y” griega.
Rueda delantera: 110/80.
Rueda Trasera: 130/70.