La Rough Crafts Sovereign Raven recrea de manera magistral la estética de los choppers de los años ochenta y noventa, manteniendo el chasis original; e incluyendo una parte ciclo de última generación.
Son cada vez más los países donde es poco viable hacer un chopper desde cero, como manda la tradición. Por ello, los constructores de motos artesanales deben aportar toda su imaginación para recrear esta estética incluyendo piezas que se puedan homologar. Es el caso de la Rough Crafts Sovereign Raven, un encargo que nos demuestra que esta Pseudocultura está preparada para entrar en la Era 3.0.
Softail/Öhlins/BST
La Rough Crafts Sovereign Raven, toma como moto donante una Harley Davidson Fat Boy de 2022. Un espectacular cruiser, del que se ha mantenido inalterado su chasis y basculante softail. A los que se han unido unas exquisitas barras de horquilla Öhlins FF521, con su recorrido acortado y montadas sobre tijas de Rough Crafts. Y junto a estas, un amortiguador, también más corto, modelo HD503 del mismo fabricante sueco, que se regula a través de un pomo situado en el lado derecho de la moto.
Este efectivo conjunto chasis/suspensiones, actúa sobre un equipo de llantas fabricadas en fibra de carbono. Compuestas por una BST (Blackstone Tek) Twin Tek, de 21”, en el tren delantero; y detrás, una espectacular llanta lenticular artesanal, de 17”. Ambas con una decoración personalizada para la ocasión; y calzadas con neumáticos Pirelli Night Dragon (120/70) y un inmenso Diablo Rosso III (240/45), delante/detrás respectivamente.
En cuanto a los frenos, volvemos a tener a un “The Usual Suspects” en los trabajos del Sr. Yeh: Beringer Brakes. Esta reconocida firma francesa, participa esta vez con piezas de la gama 4D System. Con sus espectaculares pinzas radiales monobloque, con doble disco por pinza, que han requirido soportes personalizados.
M8 114
Otro elemento que ha permanecido inalterado en la Rough Crafts Sovereign Raven ha sido su propulsor Milwaukee Eight, de 114 pulgadas (1.870 cc); y parte del embrague original. Decimos parte, porque en este último se ha instalado un sistema de accionamiento hidráulico de la italiana Rebuffini. Que incluye una carcasa modelo Comet; y una bomba radial RR90, apta para sistemas Can Bus, que es acompañada por su gemela para el freno delantero.
Decíamos antes que el propulsor era el original, sí, pero con algunos detallitos de muy buen gusto, fruto de la colaboración entre Rough Crafts y la empresa del mítico Arlen Ness. Entre estos tenemos: la tapa de balancines, la cubierta del árbol de levas y la tapa del filtro de aire. Todo ello en un elegante color negro, como el resto del motor. Lo que también incluye al arriesgado y personalísimo sistema de escape, con su silenciador tipo “petaca”, que le da buena parte de su personalidad a esta moto.
Chopper 3.0
En cuanto a la ergonomía de este chopper, se han montado unas preciosas plataformas de Rough Crafts, a las que completan un kit de mandos de Arlen Ness. Junto a ellas, un manillar modelo Fighter, del catálogo de Winston, con puños fruto otra vez de la colaboración entre estos dos grandes constructores. Un conjunto que gana en actitud, gracias a unas torretas bastante altas, Rebuffini Casino. Por último, un asiento muy bobber, que combina un soporte de BT Choppers, para cubrir la batería y demás elementos poco estéticos; y sobre el que levita el asiento propiamente dicho, completan una ergonomía que combina a la perfección la más pura estética chopper, con la obligación legal en Taiwán de mantener el chasis original.
Frisco
Para acabar, vamos a detenernos en la carrocería, o lo poco que hay de ella. Para empezar de menos a más y obviando las tapas laterales, tenemos un único guardabarros, que va fijado al basculante, lo que le permite ir muy pegado a la rueda trasera. Y, por último, sí, no hay nada más, un depósito de gasolina tipo “Frisco”, con unas curvas que marean si lo miras durante un rato. Donde, como suele ser normal en los trabajos del Sr. Yeh, encontramos elementos decorativos embriagadoramente decadentes, creados por 2 Abnormal Sides. Compuestos esta vez por dos insignias y una pieza localizada en la parte alta del depósito, fabricadas en plata. Y a las que acompañan otras a juego montadas en las varillas de los empujadores con el logo de Rough Crafts.
