Ya está disponible en los concesionarios la nueva Husqvarna Vitpilen 701. Una moto 100% urbana que incorpora el ADN de las Supermoto de la mítica marca sueca.
A Husqvarna le ha venido muy bien su compra por KTM en 2013. Prueba de ello, ha sido su importante presencia en distintas categorías deportivas y el lanzamiento de nuevos productos como el que nos ocupa.
Fotos: Husqvarna
Entre la tradición y el diseño
Para muchos, Husqvarna es sinónimo de off-road. Es normal, casi toda su historia desde 1955 ha estado ligada a las motos de campo. Buena parte de culpa la tuvo el lanzamiento de la Silverpilen en 1955. Aquella moto, de apenas 75 kg, supuso una revolución en el off-road y marcó el devenir de la marca hasta nuestros días.
Pero no todo ha sido campo. Hay que recordar que la marca sueca comenzó su andadura allá en 1903 y que compitió en el campeonato de velocidad durante el periodo de entre guerras con bastante éxito. Con este bagaje, no es raro su desembarco en el, cada vez más apetecible, sector de las motos deportivas urbanas. Un nicho que acoge flat-tracks, scramblers, etc… de cilindradas medias, donde la ligereza y un diseño arriesgado cuentan mucho.
Cuestión de familia
La Husqvarna Vitpilen 701 no ha llegado sola. Junto a ella se comercializan dos modelos de 375 cc, uno con su mismo nombre y otro llamado Svartpilen, con un aspecto más scrambler. Además, de este último modelo, se comercializará en el futuro una versión con el mismo motor que la 701.
Chasis y parte ciclo
Como era de esperar, la Husqvarna Vitpilen 701 monta un chasis multitubular de acero al cromo-molibdeno. Una estructura que le confiere la rigidez y ligereza típica en la marca. Junto a él, se ha montado un ligerísimo basculante de aluminio fabricado mediante un proceso de fundición a presión por gravedad.
Tampoco nos sorprende el fabricante de las suspensiones: WP Performance System. Una de las marcas más importantes del sector y que también forma parte del grupo KTM Industries AG. Está compuesta por una horquilla invertida con barras de 43 mm y un amortiguador anclado directamente al basculante, ambos regulables.
En cuanto a los frenos, se ha optado por Brembo. La firma italiana provee para el tren delantero una pinza radial de cuatro pistones y una flotante de un pistón detrás. Un eficiente equipo que se encarga de morder discos de 320 mm y 240 respectivamente.
Motor monocilíndrico
Como mencionábamos anteriormente, hay dos versiones de la Vitpilen: 401 y 701. Si la primera es una moto más de entrada, la segunda ya son palabras mayores. Su único cilindro de 692,7 cc entrega 75 caballos a 8.500 vueltas con un par de 72 Nm. Potencia más que suficiente para sus 157 kilos. Sin embargo, gracias al ride-by-wire, su sistema de cambio de marchas asistido y el control de tracción (APTC), seguro que esta potencia es totalmente aprovechable, permitiendo disfrutar de su gran parte ciclo.
Carrocería y diseño
Sin duda la Husqvarna Vitpilen 701 es todo un ejercicio de estilo. A caballo entre lo retro y lo futurista, esta moto nos propone una plana y minimalista carrocería, donde se sitúan casi a la misma altura el depósito de gasolina y el asiento, con su corto subchasis. Además, siguiendo esa misma línea imaginaria, delante están los semi-manillares, anclados directamente en la tija superior, una pieza hecha de aluminio fundido; y la escueta instrumentación, formada por un simple reloj digital, que recoge toda la información necesaria.
Otros rasgos estéticos importantes son: el anclaje de la matrícula en el basculante, que la hace aún más compacta; sus ópticas delantera y trasera a base de leds; y sus llantas de fundición de 17 pulgadas.
Por último, debemos mencionar algunos de sus buenos detalles. El logotipo de Husqvarna aparece grabado en llantas y tapón de gasolina. Su asiento es de cuero Mokka de alta calidad. Y las bombas de accionamiento de freno y embrague son radiales, lo que seguro dará un plus de eficacia a la frenada.
Conclusiones
Estamos ante una moto distinta. Quizás difícil de entender a primera vista, pero original sin ninguna duda. Una moto que tendrá su público principal entre los más jóvenes y que solo el tiempo nos dirá si la valentía de Husqvarna con esta propuesta fue rentable. Yo entretanto sigo mirándola.