DUCATI PANIGALE 1299S

Foto Ducati PANIGALE 1299 S

Potencia al rojo vivo.

Con la presentación de las nuevas Panigale de 1285cc, la firma de Borgo Panigale afianza su posición en el recién estrenado club de las superdeportivas de 200 caballos. Para ello ha aumentado la cilindrada de su Desmoquadro, ha introducido algunos cambios en la parte ciclo y ha incorporado todo un despliegue de electrónica de última generación. El resultado: el bicilíndrico de calle más potente jamás fabricado.

Que Ducati es toda una referencia entre las deportivas, es un hecho desde hace décadas. Con una producción anual que no llega a las 50.000 unidades (45.100 en 2014), este fabricante italiano ha plantado cara a las todopoderosas firmas japonesas gracias a una combinación de tradición, donde sus clásicos bicilíndricos a 90º grados son su máximo exponente, y de soluciones innovadoras que le separan de la competencia, como su distribución desmodrómica o el recién llegado chasis monocasco. Con estas armas, la marca boloñesa ha sido uno de los máximos animadores del campeonato de motos derivadas de serie, el SBK, que este año estrena un nuevo reglamento que obliga a los fabricantes a competir con motos muy similares a las que salen de sus cadenas de montaje, lo que ha permitido un renacer de las superdeportivas de altas prestaciones, un ejemplo de ellos son las últimas BMW S1000RR, Yamaha R1 y como no, la moto que hoy nos ocupa.

La principal novedad de las Panigales S son sus nuevos motores de 1.285cc de capacidad y pistones de 116mm de diámetro. Esta evolución del Superquadro mantiene la configuración de bicilíndrico en L ligeramente rotado hacia atrás (21º) del modelo precedente. Alcanza los 205cv a tan solo 10.500 vueltas y un par motor de 144,6Nm, un auténtico hito, ya que para esa misma potencia un tetracilíndrico necesita dar 3.000 giros más y suelen dar unos 30Nm menos de par. Aunque llegar a estas cifras ha requerido un gran esfuerzo de diseño y materiales que incluyen cárteres fabricados en molde de vacío, válvulas de titanio o la presencia del magnesio en las tapas de valancines y embrague, no habría sido posible sin la presencia de la electrónica, donde Ducati aventaja a la competencia, una brecha que no ha hecho mas que aumentar con la adquisición de la marca por Audi.

La lista de ayudas a la conducción que recibe la nueva Panigale S es impresionante, a los ya clásicos control de tracción (DTC), ABS y sistema anti-wheelie (DWC) hay que sumar un sofisticado sistema de medición de la aceleración (Inertial Measurement Unit) que interactúa con los anteriormente mencionados ABS y DWC ofreciéndoles datos de la inclinación de la moto, lo que unido al sistema Öhlins Smart EC, que adapta el tarado de las suspensiones según las necesidades, consigue aumentar notablemente el control y la seguridad en curvas. Todos estos sistemas junto con el control de freno de motor (EBC) varían según el modo de conducción que tengamos seleccionado (Race, Sport y Wet) y si aún así no estamos satisfechos podemos adaptar sus parámetros a nuestro gusto, lo que hacen de la Panigale un auténtico traje a medida.

Como era de esperar, también se ha trabajado en la parte ciclo para mejorar su ya de por sí excelente tacto. Su chasis monocasco, que acoge también el airbox, se ha modificado reduciendo el ángulo de dirección a 24º y su recorrido a 96mm. Este novedoso sistema tiene como elemento portante el motor, del que también parte su inmenso basculante monobrazo, cuyo pivote se encuentra 4mm más abajo que en la versión 2014.

Además del bastidor se han mejorado las suspensiones, introduciendo una horquilla NIX-30, con barras de 43mm de diámetro, y un amortiguador TTX36. Ambos fabricados por el especialista Öhlins, proveedor de casi todos los equipos de MotoGp. Son totalmente regulables y se complementan con el ya mencionado sistema Öhlins Smart EC desarrollado en colaboración por ambas firmas.

En cuanto a las ruedas, se combinan unas ligerísimas llantas de aluminio forjado con diseño de triple-Y, con unos neumáticos Pirelli Diablo Supercorsa SP de medidas 120/70 y 200/55 provenientes del campeonato de SuperStock. Para detenerlas se ha optado por un eficiente equipo suministrado por Brembo, del que destacan sus dos pinzas monobloque M50 de cuatro pistones que muerden sendos discos de 330mm, toda una garantía ante tanta caballería.

Aunque con esta Panigale se ha querido hacer una moto más segura y “sencilla”, no dejan de ser los circuitos su hábitat natural. Por ello no se ha querido olvidar a los asiduos a este entorno incluyendo un cambio asistido, Quick Shift, que actúa sin usar el embrague tanto para subir como para bajar marchas reduciendo los tiempos ante el cronómetro. Lo que se podrá comprobar gracias al Ducati Data Analyser que combinado con el GPS registrará los tiempos, junto con otros parámetros, se podrán evaluar una vez descargado los datos a un ordenador.

Para finalizar, queremos detenernos en los cuatro detalles estéticos que cambian para este 2015. Por un lado ha aumentado la protección del carenado frontal y las tomas de aire; el colín ahora viene dividido en dos secciones y acoge un asiento más cómodo; y por último se han rediseñado los conductos laterales y los espejos, donde van instalados los intermitentes delanteros. En cuanto al color… Rojo ¿Que esperabais?