Para 2021, Ducati recupera la denominación SP (Sport Production) para una de sus novedades más exquisita: la Panigale V4 SP. Unas míticas siglas que se usaron, hace décadas, en modelos como la 851, 888, 916 y 748, y que salvo en las Hypermotard no habían vuelto a adornar un carenado.
Como os decíamos, la nueva Ducati Panigale V4 SP es una de las grandes novedades de la marca boloñesa para 2021. Una superdeportiva que combina 214 caballos de potencia; con un peso en seco de 173 Kg; y que incluye, además, muchas piezas solo vistas en su prohibitiva hermana de 115.000 euros, la Superleggera.
Desmosedici Stradale 2021
Volviendo a la potencia de la Panigale V4 SP, debemos destacar el esfuerzo hecho por Ducati para mantener prácticamente los mismos niveles de 2020 en sus nuevos modelos. Un esfuerzo provocado por la llegada de la Norma Euro-5, que en este caso se ha conseguido solventar gracias a ciertos retoques en el sistema de escape, electrónica y motor.
Pero no todo ha sido capear el temporal. La nueva Panigale V4 SP, se beneficia de un nuevo Ducati Traction Control, derivado del usado por el departamento de carreras de la marca: el DTC Evo 3. Además, los Riding Mode crecen en número, gracias a que el Race se ha dividido en dos mapas específicos para su uso en pista: Race A y Race B, ambos, configurables en los parámetros individuales. Y que se unen a los ya conocidos Sport y Street, compartiendo con estos la capacidad de cambiar el carácter del motor, la configuración de las ayudas electrónicas y el ajuste de las suspensiones.
Para terminar con el apartado motor, dos delicatesen. Una cadena con paso 520, más estrecha y ligera; y un efectivo embrague en seco, proporcionado por el especialista transalpino STM, que incluye una tapa abierta para uso en circuito.
Solo lo mejor
Si por algo me gustan las deportivas italianas es por sus partes ciclo. Si hay una industria que mima ese aspecto de las motos son ellos y cómo no: Ducati. Esta afirmación se hace evidente en la Panigale V4 SP, en numerosos detalles. Os vamos a mencionar algunos.
Comenzando por sus suspensiones con gestión electrónica Öhlins Smart EC 2.0, que están compuestas por un amortiguador TTX36; una horquilla NIX30, con barras de 43 mm; y amortiguador de dirección. A las que complementan unas ligerísimas llantas BST de fibra de carbono, iguales a las montadas en la Superleggera, calzadas con neumáticos Pirelli Diablo Supercorsa SP, que la conectan al suelo.
Y acabando por unas exclusivas pinzas Brembo Stylema, en el tren delantero; accionadas por una modulable bomba radial MCS, del mismo fabricante, que completan este auténtico derroche de calidad. Hay que recordar que tanto esta bomba, como la del embrague, son auto-purgantes, lo que permite su sangrado «natural», evitando la necesidad de intervención en el sistema para extraer las burbujas de aire. Sin duda lo mejor de lo mejor.
También para pista
A diferencia de lo que pueda parecer, esta exquisita moto que muchos expondrían en el salón de su casa y no arrancarían jamás, está hecha para pegarse en la arena de los circuitos. Buen ejemplo de ello es todo lo que os hemos contado hasta ahora, y cómo no, el kit Racing que se incluye en su compra. Este está compuesto por unos tapones mecanizados para sustituir los retrovisores; un kit para eliminar la placa de matrícula; un sistema para recabar datos denominado Ducati Data Analyzer, con módulo GPS; y la ya mencionada tapa abierta para el embrague. Completando el ADN deportivo de la Panigale V4 SP se suman unas estriberas pluri-regulables de Rizoma. Que mejoran la conexión entre el piloto y la máquina.
Joya numerada
Para terminar con este pequeño repaso, nos vamos a fijar en lo que se ve en las fotos. Donde destaca su espectacular decoración con depósito en aluminio, al natural; carenados negro mate; y detalles en rojo fluorescente. Una librea que se inspira en la usada durante las pruebas invernales por los equipos oficiales y que se completa con la inclusión de piezas de carbono, como el guardabarros delantero y los alerones; y una preciosa tija superior mecanizada a partir de una pieza de aluminio, donde encontramos grabado un dígito que indica su pertenencia a una serie numerada… más no se puede pedir.