La nueva Rough Crafts Bologna Dogfight supone una nueva muestra de la calidad de los caferacers que fabrican en Rough Crafts. Una Ducati Monster 821 que combina a partes iguales tecnología y nostalgia.
Fotos: JL Photography
Como nos comentaba Winston Yeh, alma mater de Rough Crafts, las Monster de la serie 821/1200 son una excelente base para crear un caferacer y unas de sus favoritas a la hora de fabricar una moto de este estilo. Y es que su bonito y escueto chasis multitubular, sus líneas redondeadas y musculoso motor, son un lienzo en blanco que ha enamorado a multitud de propietarios y transformadores, como en el caso que hoy nos ocupa.
821
En concreto, la moto donante para este proyecto, denominado Rough Crafts Bologna Dogfight, ha sido una Ducati Monster 821 de 2019. Una moto que ha mantenido durante esta transformación su motor, chasis principal y basculante. Si bien, el primero ha recibido algunas mejoras dignas de mencionar. Entre estas tenemos la incorporación de un filtro de aire de alto rendimiento del especialista Sprint Filter. Junto al que encontramos un sistema de escape que combina el original con unos sinuosos colectores MS Pro; y dos silenciosos SC Project Dual Conic 70´s, que le confieren una línea más elegante y nostálgica. Por último, una cadena RK Takasago RXW, completa el apartado de mejoras en el propulsor.
Artesanía y 3D
Como os decía el chasis se ha mantenido, no así el subchasis que ha sido sustituido por un viejo conocido, uno similar al montado en otra creación de Winston, la Apex Assault. Se trata de una pieza fabricada mediante CNC, que soporta un colín creado mediante impresión 3D. Mismo proceso que se ha usado en el carenado, que más bien es una careta sobredimensionada, donde encontramos una doble óptica superpuesta en el lado derecho, proporcionada por Koso, que también se encargó de la minúscula luz trasera 3 en 1.
Para terminar con la carrocería, tenemos un depósito de gasolina fabricado artesanalmente que reproduce las marcadas hendiduras a ambos lados que también tiene el mencionado colín, proporcionando al conjunto el necesario equilibrio en un proyecto de este tipo… Una autentica obra de arte.
Efectividad
Como es normal en Rough Crafts, para la parte ciclo se ha optado por piezas de algunos de los mejores proveedores. Ejemplo de ello son sus suspensiones, donde tenemos un amortiguador Öhlins, proveniente de una Monster 1200 S, que actúa en combinación con un kit de Andreani instalado en la horquilla. Esta última, además ha recibido una cobertura en negro e incorpora por un lado, una tija inferior de CNC Racing; y por otro, una superior fabricada exprofeso, que lleva integrados los semimanillares y la instrumentación original. Sin duda, una soberbia equipación que se conecta con el asfalto mediante unas exclusivas llantas fabricadas en fibra de carbono, de la sudafricana BST Blackstone TEK, modelo Mamba 7 TEK. Que van calzadas con neumáticos Pirelli Diablo Rosso IV.
En cuanto a los frenos, volvemos a encontrar a otro «Sospechoso Habitual» en las creaciones del Sr. Yeh: Beringer Brakes. Que para esta ocasión nos deleita con unas pinzas radiales de cuatro pistones, de la gama Aerotec, combinadas con discos Moto-Master, en el tren delantero; y una axial de dos pistones para el trasero. También se ha encargado esta exclusiva firma francesa de la bombas y manetas del freno y embrague. Que en el caso de la primera se completa con un protector anticaídas, de CNC Racing.
Chuches y pintura
Otra seña de identidad de todas las creaciones de Winston Yeh son sus delicatessen. En la Rough Crafts Bologna Dogfight, tenemos ejemplos de ello como su asiento, uno de esos que deberían estar bajo techado, obra de Chirui Leather Custom; las insignias que lucen a ambos lados del depósito, creadas por 2 Abnormal Sides; o los reposapiés regulables de Sato Racing.
Por último, en el tema de la decoración de este precioso caferacer, debemos mencionar el increíble trabajo realizado por Rover Works Custom Paint. Al que se unió el buen hacer de otros artesanos como son Anodizing, que se encargó de los cromados; SFC Simon Fiber Craft, de la fibra de carbono; y Artitek, responsable del mecanizado de un buen número de piezas.
